news!     bio/cv     proyectos     texto/biblio     enlaces web      contacto     prensa          
   eng   fr   esp   cat 
HVITE NETTER / WHITE NIGHTS

5 Septiembre- 5 Octubre, 2014
RAKE visningsrom
Exposición en el parking garage de Elgesetergate 21.
Trondheim, Noruega. 


HVITE NETTER / WHITE NIGHTS (info e imágenes PDF)




























NOCHES BLANCAS EN TRONDHEIM

La ciudad, por definición, es un ente en continuo movimiento. No hablo sólo del movimiento evidente de la gente, de los autos en sus calles, de los edificios que aparecen o desaparecen, de los barrios que cambian sus propósitos, de las poblaciones que desplazan a otras. Me refiero también a cómo los modos de percibir la ciudad la transforman. En la construcción de un espacio público, en su constante disputa, hay una memoria y un futuro. En esa tarea, la construcción de un espacio compartido, las imágenes juegan un papel crucial. Imágenes en movimiento, imágenes del poder, imágenes que proponen nuevas ideas, imágenes de resistencia, imágenes que describen costumbres y modos de vida, imágenes sucias, gordas, radiantes, ruidosas, aburridas o escandalosas. Algunas imágenes construyen imaginarios, pero sólo unas pocas se graban en nuestra memoria. Y los imaginarios no sólo encarnan nuestra percepción de la ciudad, también la construyen.

Vine a Trondheim invitado por Trygve y Charlotte, miembros infatigables del proyecto RAKE. Nada más llegar, me hicieron un enorme regalo: un montón de películas realizadas por los estudiantes de esta ciudad. Como sabrán, los habitantes de Trondheim son en su mayoría estudiantes: o bien estudiantes en activo, o antiguos o futuros estudiantes. La Universidad ocupa casi la mitad de la superficie de esta villa. Y los universitarios de Trondheim organizan desde siempre una gran fiesta, la UKA. Esta fiesta es tan importante que, desde los años 20, se han producido películas para promoverla y construir una memoria. Lo que cuentan estos filmes es que, con esta excusa, los estudiantes se toman literalmente las calles de la ciudad. Todos los filmes tienen una estructura parecida. Aparece en primer lugar una procesión en la que desfilan los distintos departamentos portando toda clase de pancartas, pero también de construcciones parateatrales, a menudo rematados con slogans y escrituras: tranvías, trenes, barcos, autos, cohetes, sputniks, bombas atómicas, robots, hospitales, monstruos, antenas de televisión o laboratorios químicos, autopistas y trolls, entre otros.

Estas procesiones estudiantiles, que tuvieron lugar entre los años 20 y finales de los años 80, nos legan así indicios de los intereses de esta época. Ello acaba conformando una recopilación de iconos deslenguados, celebratorios algunos, sarcásticos otros, que en muchas ocasiones señalan abiertamente el conflicto. Lo más impresionante es su poder de convocatoria: miles de personas se agolpaban a ver estos desfiles tan rudimentarios, poco importa si bajo el sol, o la nieve. Comparados con las maneras de hacer de hoy en día, estos métodos aparecen realmente arcaicos: caminar por la ciudad portando objetos chapuceramente realizados y maravillarse de todo aquello. La pregunta ahora sería quizás si no será este el momento, una vez abandonada la calle, de tomarla de nuevo y habitar el desierto. ¿No es el tiempo de que aquellos que tienen una idea de comunidad, lo desplieguen, lo contrasten y lo pongan a la vista de toda la ciudad? ¿No es el barrio de Svartlamon un proyecto de ciudad otra? Durante las últimas semanas pusimos a prueba estas preguntas. Tratamos de crear nuevas imágenes, tomando como pretexto estas prácticas del pasado.

En esa misma ciudad de Trondheim, entre la autopista y el mar, se levanta una torre de madera de 3 pisos con una escalera hasta la cima. A los bañistas del Sjobaden les gustan las emociones fuertes, experimentar en el límite de la ciudad con los propios límites de su cuerpo. Bañarse en el agua muy fría, desplomar su esqueleto desde muy alto o tomar el sol en todo su cuerpo. Estas prácticas se han constituido en una tradición, ya son varias generaciones las que ocupan su tiempo en las cercanías de esta torre. Los bañistas del Sjobaden han terminado por elaborar un sofisticado alfabeto de gestos y de signos del que sólo algunos pocos conocen los secretos.

Existe también un parking construido en los optimistas años 60, pequeña catedral de la religión modernista, condenado a la demolición, que en su letargo sigue filtrando eficientemente la luz sobre las parcelas rectangulares. La propuesta de RAKE, es abrir las puertas de este lugar a la gente y señalar que se podría usar de maneras muy distintas. Por mi parte, contribuí con unas imágenes. Yo creo que los de RAKE y sus amigos están cambiando la ciudad.

Jordi Colomer
Trondheim, Agosto 2014.

artscenetrondheim + imágenes